Desde la década de 1940, cuando se empezó a utilizar los contenedores flexibles intermedios a granel (FIBC) -principalmente en la industria del caucho para el transporte de negro de humo-, hasta la década de 1960, cuando apareció el polipropileno, que dio lugar a los sacos a granel tal y como los conocemos hoy en día, se puede observar una innovación constante y continua en la fabricación de estos sacos gigantes.
Aunque los sacos a granel se utilizan para transportar una gran variedad de mercancías, desde productos farmacéuticos y cereales hasta alimentos y madera, un aspecto de los sacos a granel que no puede pasarse por alto es el forro, que si se utiliza correctamente puede ayudar a que sus FIBC duren más y evitar que los productos se contaminen.
Los revestimientos pueden introducirse sin apretar en la bolsa o fijarse a ella. Todo depende de para qué se utilizan las bolsas. Y los materiales de los revestimientos varían desde el polietileno y el aluminio hasta el polipropileno.
Veamos los tipos de revestimientos disponibles.
De forma tubular y sin pitorros, estos revestimientos están hechos de polietileno y suelen estar abiertos por arriba y sellados por abajo. Pueden termosellar. Estos revestimientos cilíndricos, también llamados revestimientos con fuelle, pueden introducirse en las bolsas FIBC o comprarse en rollos para introducirlos más tarde. Son un diseño muy popular.
Estos revestimientos de polietileno adoptan la forma del FIBC (incluido el vertedor) y facilitan el llenado y la descarga del producto. Estos revestimientos pueden retirarse del FIBC o dejarse dentro. Son fuertes, resistentes a los productos químicos, anti estáticas y tienen barreras contra la humedad y el oxígeno, lo que garantiza la seguridad de sus mercancías. Son populares porque no forman ningún tipo de pliegues o dobleces que puedan dificultar la velocidad de llenado o descarga.
Estos revestimientos se fabrican con deflectores incorporados y están diseñados para adaptarse a los sacos FIBC para los que se fabrican. Se insertan en ellas en la fase de fabricación y no se venden por separado. Los revestimientos con deflectores ayudan a mantener la forma cuadrada de la bolsa.
Estos revestimientos, fabricados con materiales aprobados por la FDA, están diseñados para mantener los alimentos frescos y puros a salvo de la contaminación.
La principal ventaja de estos envases son sus propiedades antiestáticas. Los hay de distintos tipos: por ejemplo, los de polipropileno con una película conductora alrededor o los que están completamente compuestos por una película de polietileno antiestático.
Los FIBC con revestimiento aumentan la eficacia de los sacos a granel, facilitan el llenado y la descarga, ayudan a mantener intacta la forma de los sacos, los protegen de la humedad y el oxígeno y mantienen el producto en su interior seguro y libre de contaminación.
Los revestimientos se utilizan en las industrias alimentaria y farmacéutica para mantener la higiene de los productos, así como en el transporte de productos químicos, resinas, polvo y semillas.